Los dispensadores de agua o fuentes de agua se convierten en un elemento fundamental dentro de los centros educativos. La necesidad de los estudiantes por hidratarse es un hecho comprobado.
En la actualidad, es aún más importante asegurarse de que las fuentes de agua para colegios no sean vía de contagios de enfermedades ni guarden microorganismos nocivos.
Para tomar una decisión sobre qué fuentes de agua son mejores, comencemos por explicar la importancia de proveer una hidratación segura y constante en los niños.
¿Por qué es importante la hidratación en los estudiantes?
Los dispensadores de agua o fuentes de agua se convierten en un elemento fundamental dentro de los centros educativos debido a que la deshidratación afecta de forma especial a los niños.
En el momento que un menor empieza a sentir sed ya ha perdido más del 20% de su capacidad física y mental sin darse cuenta. La consecuencia directa de todo esto irá asociada a un bajo rendimiento académico debido a lo siguiente:
El cuerpo requiere más hidratación tras largas horas de esfuerzo mental
Muchas horas de concentración y esfuerzo mental hacen que nuestro cuerpo demande una cantidad mayor de agua que la habitual.
Estudios científicos han demostrado que no beber la suficiente cantidad de agua influye en la capacidad de aprendizaje de las personas. Si no bebemos suficiente agua, la memoria a corto plazo, la coordinación motora o los estímulos se pueden ver alterados.
La deshidratación afecta los niveles de aprendizaje y concentración
“Beber poca agua dificulta el pensamiento porque deshidrata el cerebro y éste pierde la posibilidad de un funcionamiento óptimo, ya que la materia gris se encoge, entorpeciendo el aprendizaje y el cerebro se contrae”, afirma la Practitioner de Brain Gym.
Mantenerse hidratado mejora los reflejos cerebrales
También se ha demostrado que beber suficiente agua ayuda a tener mejores reflejos cerebrales; de este modo las personas que presentaban mayores niveles de deshidratación tenían que llevar a cabo una actividad neuronal mayor para alcanzar los mismos resultados que las personas que estaban hidratadas.
Fuentes de agua con filtro, la alternativa a las botellas de agua
Ahora sabemos que si los alumnos de un colegio están bien hidratados mejorarán en su rendimiento académico y esto es bueno tanto para ellos como para el propio colegio. Y, ¿Cómo hacer para que beban suficiente agua de forma segura?
Las botellas de agua de un solo uso pueden parecer la opción más práctica, sin embargo, no es la solución más sostenible. Por el contrario, un dispensador de agua con filtro en las escuelas tiene las siguientes ventajas:
- Agua purificada libre de contaminantes
- Consumo de agua ilimitado
- Menor propagación de enfermedades con dispensadores de agua sin contacto
Dispensadores de agua para colegios ¿Dispensador con botella o fuente conectada a la red?
Existen muchos tipos de fuentes de agua para escuelas en el mercado. Las principales que puedes diferenciar son las fuentes con botella y las fuentes conectadas a la red.
Dispensadores de agua para escuelas libres de virus y bacterias
Como todo el mundo sabe los colegios son lugares idóneos para que los virus y bacterias se reproduzcan. Uno de los focos de infección principal es el agua.
Las fuentes de agua de Culligan llevan integrados tanto el sistema de purificación de agua Firewall como el sistema de protección Biocote (ambos certificados por la Water Quality Association) que aseguran que el agua que beben los niños es totalmente pura y libre de virus y bacterias.
En los centros educativos la higiene es fundamental y no está demás empezar ofreciendo a los alumnos algo tan básico como un agua totalmente pura.
Si trabajas en un colegio, academia, guardería… en Culligan contamos con una amplia selección de dispensadores de agua. Ponte en contacto con nosotros y un experto te asesorará para ver cuál de todas las que disponemos es la que más se adapta a tus necesidades.
Agua gratis en colegios en Andalucía
La Junta de Andalucía ha tomado nota de la importancia de tener agua gratuita a disposición de los alumnos siempre que lo necesiten.
Además, se considerará como infracciones graves la dispensación en centros educativos de menús no adaptados a las necesidades nutricionales del alumnado o con desequilibrios del aporte calórico; la utilización de alimentos o bebidas con alto contenido en ácidos grasos saturados, trans, sal y azúcares añadidos; la publicidad de alimentos en áreas sanitarias donde se atiende a menores o el incumplimiento de la exigencia de acceso al agua potable.