¡La deshidratación puede ser leve, moderada o severa!
La forma leve se presenta con el síntoma de la sed: boca seca, orina oscura, dificultad de concentración y cefalea ligera.
La moderada se manifiesta con el rostro enrojecido, sed intensa, piel seca, y caliente, oliguria (orina escasa), orina de color oscuro, vértigo que empeora al ponerse de pie, estado de debilidad, calambres en brazos y piernas, llanto con o sin lágrimas, irritabilidad o somnolencia, malestar general, cefalea, boca seca y pastosa, lengua seca, labios agrietados y saliva espesa.
Los síntomas de deshidratación de moderada a severa son: hipotensión, desvanecimiento, contracciones musculares en brazos, piernas, estomago y espalda, estado letárgico o convulsiones, descompensación cardiaca, abdomen hinchado, fontanelas deprimidas, ojos hundidos con disminución o ausencias de lágrimas, piel arrugada, pulso acelerado y débil, respiración rápida y profunda.
En la deshidratación severa puede haber anuria (falta de orina por más de seis horas) e imposibilidad de ingerir agua por vía oral.