Todos queremos ahorrar en la compra de electrodomésticos, pero en muchas ocasiones tomamos decisiones erróneas que perjudican la economía de nuestra familia. Ya sea porque estrenamos casa o apartamento, o porque tenemos que reemplazar los electrodomésticos viejos o estropeados, llega un momento en que hay que hacer una inversión en la adquisición del nuevos aparatos. Es importante conocer algunos trucos para ahorrar en la compra de electrodomésticos.
Como siempre, cuanta más información seamos capaces de recopilar, más posibilidades tendremos de acertar y ahorrar en la compra de electrodomésticos. Un factor que cada vez tiene más importancia a la hora de elegir qué electrodomésticos compramos es el coste energético, es decir, su repercusión en la factura de la luz, pero también su impacto en la factura del gas o del agua. Incluso nos puede servir analizar la calidad del agua del hogar, como veremos a continuación.
Los electrodomésticos y la factura de la luz
Los electrodomésticos suponen gran parte del coste de la energía de los hogares españoles. Por tanto, de su uso inteligente y de la buena elección a la hora de adquirirlos depende que podamos reducir la factura energética del hogar. A veces nos quejamos de lo cara que resulta la factura de la luz y gran parte de los motivos de su alto precio está en que estamos usando electrodomésticos que no son eficientes desde el punto de vista energético.
Si tenemos que comprar un electrodoméstico nuevo, hay que aprovechar la oportunidad para acertar de lleno. Queremos ahorrar en la compra del electrodoméstico, pero eso no necesariamente significa comprar la nevera o el lavavajillas o la nevera más baratos que veamos. Todos sabemos de la importancia de la letra pequeña, es decir, de la información que muchas veces no leemos a la hora de tomar la decisión de compra.
Los electrodomésticos baratos salen caros
El consejo número 1 para ahorrar en la compra de electrodomésticos es precisamente descartar aquellos modelos muy baratos, o con prestaciones muy limitadas. Aunque parezca una contradicción, los electrodomésticos low-cost son los que a la larga salen más caros, ya que son los que se estropean más fácilmente, los que menos duran y los que más energía consumen.
Un segundo consejo para ahorrar en la compra de electrodomésticos es comprar el tipo de aparato que se ajusta a nuestras necesidades. Una familia formada por una pareja y un hijo tendrá necesidades diferentes a las de una familia con cuatro hijos. La carga de la lavadora de una familia de tres integrantes es diferente a la de una familia de cinco miembros.
Buscar, comparar y finalmente decidir
El tercer consejo para ahorrar en la compra de electrodomésticos es rastrear precios y modelos en diferentes tiendas, y también en tiendas online. Es una buena idea hacer un seguimiento en diferentes establecimientos físicos y de internet. Hoy en día es más fácil porque las tiendas publican sus precios en internet. Además, podemos ir a una tienda que tenga el modelo en exposición y de esta manera podemos ver su apariencia real, y comprobar la calidad de los materiales con los que están fabricados.
Un cuarto consejo para ahorrar en la compra de electrodomésticos es solicitar a los fabricantes o distribuidores toda la información sobre consumo energético. A veces esta información no está totalmente disponible, pero otras veces la podemos encontrar en la página web del fabricante y la podemos descargar. De esta manera podremos respondernos ante cuestiones sobre cómo gastar menos agua al poner la lavadora o cómo ahorrar energía al poner el lavavajillas. Al final, uno de los puntos importantes es poder reducir la factura de la luz, del agua o del gas.
Elegir electrodomésticos que sean eficientes
Un quinto consejo para ahorrar en la compra de electrodomésticos es elegir modelos que destaquen por su eficiencia energética. En este sentido es recomendable comprobar que el fabricante cumpla con los requisitos medioambientales y que el equipo que vamos a adquirir cuente con certificados de calidad medioambiental. Los electrodomésticos con etiqueta energética A, A+, A++ o A+++ son más caros, pero a medio y largo plazo acaban siendo una buena inversión por el ahorro significativo en la factura de los suministros energéticos. Por ejemplo, si comparamos la lavadora o el lavavajillas más eficiente (A+++) y los menos eficientes (D) podemos obtener un ahorro en energía de entre el 50% y el 55%.
Otro consejo para ahorrar en la compra del electrodoméstico es, por un lado, vender tus viejos aparatos. Con el dinero que obtengas podrás financiar parte del pago del equipo nuevo. Y por otra parte, conviene informarse de si está vigente alguna campaña de ayudas por la renovación de electrodomésticos. Algunas administraciones públicas apoyan con descuentos por la adquisición de equipos más eficientes energéticamente.
Finalmente, otro buen consejo para ahorrar es llevar a cabo un buen mantenimiento y un buen uso de los electrodomésticos que hayamos adquirido. Esto significa conocer las prestaciones de los equipos y hacerlos funcionar correctamente, pero también estar al tanto si hay que cambiar alguna parte o componente del equipo. En el caso de las lavadoras y del lavavajillas, hay que estar pendiente de la acumulación de cal motivada por el exceso de calcio en el agua, ya que muchas veces no nos imaginamos cómo llega a estropear la cal en el agua los electrodomésticos. Esto nos ayuda a prevenir averías que son costosas de reparar y que reducen el tiempo de vida útil del electrodoméstico, y una manera de prevenir estos problemas es saber qué tipo de agua tenemos e instalando un descalcificador en el hogar para eliminar ese exceso de cal.